El viernes pasado recibí en Cangas la visita de mi compadre y su señora esposa...para celebrar tan magno acontecimiento nos fuimos a cenar uno de los restaurantes que más me gustan a mi del mundo mundial, si no el que más...
Ya he hablado más de una vez sobre este lugar pero aprovecho que me ha dado por hacer reseñas de las actividades ociosas que hago para compartir un resumen de la cena...
De primero compartimos un plato ya clásico en el Blanco: canutillos de cecina con membrillo y pimiento asado con parmesano por encima...muy ricos con tanta mezcla de sabores en principio antagónicos...después una tapa cada uno de boletus con jamoncito, huevo de campo y puré de patatas. La yema del huevo de campo sin romper pero blandita, el puré de patata hecho con aceíte de trufa...sinceramente espectactular...
Después varios segundos a compartir...lomos de salmonete sin escamas (que buenos, frescos y en su punto), los tradicionales cachopinos (sanjacobos) de jabalí con un queso de cabra de por ahí arriba acompañados de puré de castañas y por último un rulo de lechazo...una especie de bloque de lechazo sin hueso ni nada compactado en la propia gelatina del bicho...esto último acompañado de patatas con queso del Rey Silo fundido por dentro...
Después de postre compartimos entre todos 2 de helado de quesos asturianos hechos también con huevo de campo...un mundo nuevo en el universo helado de postre...para beber una botella de Aalto y luego copita de postre...yo un gin tonic de Junípero con una tónica italiana extra seca, Kike (otro, no yo) tardó casi 10 minutos de reloje en prepararlo...espectacular...
Siempre que voy me acuerdo de la cara de sorpresa que pusieron un par de niñas de Madrid cuando empezaron a escuchar las opciones de cocina de barra...ju ju ju...
Como siempre digo..:Cangas cada vez está mejor, la oferta gastronómica (encabezada por El Blanco con una propuesta distinta a la tradicional pero sin perder lo básico) y un entorno natural y patrimonial envidiable...dentro de nada tendremos Parador Nacional...ya sabéis...para una experiencia gastronómica distinta y espectacular relación calidad-cantidad-precio...
Ya he hablado más de una vez sobre este lugar pero aprovecho que me ha dado por hacer reseñas de las actividades ociosas que hago para compartir un resumen de la cena...
De primero compartimos un plato ya clásico en el Blanco: canutillos de cecina con membrillo y pimiento asado con parmesano por encima...muy ricos con tanta mezcla de sabores en principio antagónicos...después una tapa cada uno de boletus con jamoncito, huevo de campo y puré de patatas. La yema del huevo de campo sin romper pero blandita, el puré de patata hecho con aceíte de trufa...sinceramente espectactular...
Después varios segundos a compartir...lomos de salmonete sin escamas (que buenos, frescos y en su punto), los tradicionales cachopinos (sanjacobos) de jabalí con un queso de cabra de por ahí arriba acompañados de puré de castañas y por último un rulo de lechazo...una especie de bloque de lechazo sin hueso ni nada compactado en la propia gelatina del bicho...esto último acompañado de patatas con queso del Rey Silo fundido por dentro...
Después de postre compartimos entre todos 2 de helado de quesos asturianos hechos también con huevo de campo...un mundo nuevo en el universo helado de postre...para beber una botella de Aalto y luego copita de postre...yo un gin tonic de Junípero con una tónica italiana extra seca, Kike (otro, no yo) tardó casi 10 minutos de reloje en prepararlo...espectacular...
Siempre que voy me acuerdo de la cara de sorpresa que pusieron un par de niñas de Madrid cuando empezaron a escuchar las opciones de cocina de barra...ju ju ju...
Como siempre digo..:Cangas cada vez está mejor, la oferta gastronómica (encabezada por El Blanco con una propuesta distinta a la tradicional pero sin perder lo básico) y un entorno natural y patrimonial envidiable...dentro de nada tendremos Parador Nacional...ya sabéis...para una experiencia gastronómica distinta y espectacular relación calidad-cantidad-precio...
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