12 de noviembre de 2009

Un puesto de chicles…

Estos días en los que empieza a hacer frío en Madrid (bueno, fresquito soportable) y comiendo me he fijado a través de la ventana en una anciana necesitada que pone un pequeño puestecillo de mecheros y chicles en el lugar que, cuando hace más o menos bueno, ocupan las mesas del restaurante…

Esta señora mayor, desvalida y necesitada inspira una gran ternura, dan ganas de llevar a casa e invitarla a un plato de algo caliente y reconfortante…yo, como tengo debilidad por las personas mayores y necesitadas, siempre me compro unos chicles…porque la señora te mira con agradecimiento y una sonrisa…

Los mayores, cercanos y lejanos, tienen sus cositas…pero son los que nos han abierto camino, los que nos han dado las cosas que ahora tenemos y que, de puro cotidianas, hay veces que damos por sentado y no valoramos en su justa medida…

Esta señora, mayor, desvalida y necesitada anda con dificultad, tiene un abrigo blanco sucio, con una capucha que tiene toda la pinta de ser algún regalo…me recuerda a un señor mayor que siempre estaba pidiendo ayuda en un portal de Istiklal Cadessi en Estambul…al cabo de los meses, durante el comienzo de mi segundo y último otoño en Estambul dejamos de verlo…siempre me quedó la duda de qué pasó con aquel señor que, para más INRI, me recordaba a mi abuelo paterno…

En fin…que si podéis echar una manilla, de la forma que sea, a esos ancianos mayores, desvalidos y necesitados (en el sentido que sea) hacedlo…ellos os lo agradecerán…y vosotros os sentiréis muchísimo mejor…

5 comentarios:

Anónimo dijo...

La verdad es que la vejez es la etapa que me despierta mas ternura...que bonito lo que cuentas, a mi me pasa igual Kike, me despiertan una especie de intriga (que no pena) y admiración...
Echemos una manilla, pues claro que si!! ;)

Anónimo dijo...

Pero nunca echemos una manilla para sentirnos nosotros bien. Que si ayudamos sea siempre desinteresadamente

K. dijo...

Anónimo 2...un profesor de San Telmo nos contaba que hay que copular más...sí...hacer frases copulativas...sin elegir.

Si ayudo a esa señor y encima me siento bien...es mejor...no?...dos cosas buenas que surgen de una sola acción...

El no reconocerlo, el hacer el bien de manera "abnegada" negando el placer que nos causa el hacer buenas obras es algo que arrastramos del pasado...y algo que debemos sacudirnos para ser lo más felices posibles...

Anónimo dijo...

Sigo pensando que hay que ayudar al projimo pq asi lo hizo el Señor y para eso estamos aqui. Para seguir su ejemplo. De colores!!!

Anónimo dijo...

Esto es uno de los motivos por los que te quiero...no pierdas nunca esa capacidad.(Indonesia)